PREPARADO POR: IPPF/REGIÓN DEL HEMISFERIO OCCIDENTAL
Antecedentes:
La Organización Mundial de la Salud declaró al virus del Zika y su posible vínculo con defectos congénitos como una emergencia internacional. Un brote del virus del Zika, transmitido por mosquitos, se detectó en Brasil en mayo pasado y desde entonces dicho virus se ha difundido a más de 20 países en Latinoamérica.
La principal preocupación al respecto son los posibles vínculos del virus con la microcefalia, una anomalía consistente en el desarrollo insuficiente del cráneo en los recién nacidos. En la mayoría de los casos, la microcefalia se asocia con daños cerebrales. Los casos reportados de microcefalia están aumentando en Brasil, aunque las investigaciones aún deben confirmar si el virus del Zika es el causante de esta condición. En Brasil, durante los últimos cuatro meses, se han reportado más de 3,500 casos de microcefalia en recién nacidos. Esta cifra llama la atención si se compara con el promedio anual de 163 casos reportados a nivel nacional.
La directora general de la Organización Mundial de la Salud, Dra. Margaret Chan, reconoció que entender los vínculos entre el virus del Zika y la microcefalia es algo difuso. También expresó que la incertidumbre supone una “pesada carga” para las mujeres embarazadas y sus familias en todo el continente americano. Dijo que la designación de emergencia permitirá a la agencia de salud coordinar los muchos esfuerzos para obtener las respuestas que se requieren desesperadamente. Según el New York Times, las investigaciones sobre los efectos del virus del Zika en mujeres embarazadas están en camino, en al menos tres países: Brasil, Colombia y El Salvador.
Debido a que no existe una vacuna o tratamiento para el virus del Zika y porque incluso los exámenes para detectarlo no son confiables, los gobiernos están incrementando sus esfuerzos en materia de fumigación y urgen a la ciudadanía a que tome las medidas preventivas adecuadas para evitar los mosquitos. Adicionalmente, muchos gobiernos en la región han aconsejado a las mujeres evitar quedar embarazadas hasta que se comprenda y controle mejor el virus:
- Colombia: posponer el embarazo de 6 a 8 meses.
- El Salvador: posponerlo hasta 2018.
- Ecuador: posponerlo (no se tiene un tiempo límite).
- Jamaica: posponerlo de 6 a 12 meses.
- Honduras: posponerlo (no se tiene un tiempo límite).
Nuestros mensajes principales:
En una región donde aproximadamente la mitad de los embarazos no son planificados y donde los abusos sexuales prevalecen, las recomendaciones de los gobiernos para posponer los embarazos no es razonable. El hecho de pedir a las mujeres que eviten quedar embarazadas sin ampliar el acceso a la anticoncepción y a la educación, o hacerlo en lugares en donde los servicios de aborto seguro no son legales, no constituye una política sólida en materia de salud pública.
Es esencial reconocer que las mujeres tienen el derecho de tomar sus propias decisiones sobre si quieren tener hijos y cuándo quieren tenerlos. Sin embargo, en Latinoamérica y el Caribe muchas mujeres y jóvenes no tienen la posibilidad de ejercerlo:
- Un estimado de 23 millones de mujeres no pueden satisfacer su necesidad de acceder a métodos anticonceptivos. Ellas representan el 75% de los embarazos no deseados en la región (Guttmacher Institute).
- Latinoamérica también cuenta con algunas de las leyes más restrictivas en materia de aborto en el mundo: un estimado de 95% de los abortos se desarrollan en condiciones no seguras (Guttmacher Institute).
Las mujeres pobres y aquellas que viven en áreas rurales, donde el contacto con los mosquitos es parte de la cotidianidad, son más propensas a infectarse y es menos probable que tengan acceso a educación sexual, métodos anticonceptivos y servicios de aborto seguro, cuando son legales. En Brasil, por ejemplo, la epidemia se concentra en mujeres jóvenes, pobres y pertenecientes a pueblos indígenas y afrodescendientes, que viven en las áreas menos desarrolladas del país.
Las mujeres jóvenes están especialmente en riesgo de tener embarazos no deseados, debido a la falta de educación para la sexualidad y los tabúes alrededor de la misma: el 22% de las adolescentes en América Latina y el Caribe afirman haber tenido relaciones sexuales antes de los 15 años. Este es el porcentaje más alto a nivel mundial.
Estos retos se agravan debido a una reducción de los fondos destinados a la salud sexual y reproductiva en la región:
- Las subvenciones producto de la ayuda oficial al desarrollo (AOD) por parte de donantes bilaterales a gobiernos en Latinoamérica descendió en un 31% de 2009 a 2010 (Indicadores de desarrollo globales. Banco Mundial. (http://databank.worldbank.org/ddp/home.do).
- En 2010, menos del 1% de la ayuda oficial al desarrollo a nivel global fue destinado de manera específica para las necesidades en materia de salud sexual y reproductiva, en Latinoamérica y el Caribe (Indicadores de desarrollo globales. Banco Mundial. (http://databank.worldbank.org/ddp/home.do).
- El Fondo de Población de las Naciones Unidas estima que la brecha para la financiación de la salud y los derechos sexuales y reproductivos en Latinoamérica y el Caribe es de USD $1.85. Simultáneamente, la financiación para las organizaciones de la sociedad civil que trabajan en estas áreas disminuyó en un 7% (Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico, datos oficiales más recientes. 2011).
Acciones clave requeridas:
Adicionalmente a todos los métodos sustanciales requeridos para el control de la población de mosquitos, las siguientes acciones son cruciales para asegurar una respuesta integral a la epidemia:
- Asegurar que las mujeres y las adolescentes tengan acceso a una gama completa de métodos anticonceptivos asequibles, incluyendo la anticoncepción de emergencia. Lo anterior es válido especialmente para aquellas que viven en condiciones de pobreza, en zonas rurales y áreas periurbanas. Solicitar a las mujeres retrasar su embarazo sin proporcionarles las herramientas para hacerlo es inconcebible.
- Ampliar el acceso a servicios de aborto seguro. En una región con una de las legislaciones más restrictivas a nivel global en materia de aborto, las mujeres tienen el derecho de decidir si se quieren embarazar y cuándo hacerlo. No solo durante esta crisis de salud pública, sino durante los 365 días del año.
- Implementar campañas de sensibilización para que las mujeres y las jóvenes accedan a información sobre el virus del Zika, y estén conscientes de los riesgos en que incurren si deciden tener hijos.
- Mayor apoyo para las mujeres que deciden continuar con su embarazo y aquellas que tienen hijos nacidos con microcefalia.
- Acceso universal a exámenes para detectar el virus del Zika en etapas tempranas del embarazo.
- Liderar una respuesta coordinada al virus del Zika, a través del involucramiento de actores de diferentes sectores, incluyendo a la sociedad civil.
Estadísticas de diferentes países y la región que pueden ser de utilidad:
En Latinoamérica, se practican 4.4 millones de abortos anualmente, de los cuales un 95% no son seguros. Casi 1 millón de mujeres deben ir al hospital cada año como consecuencia de un aborto no seguro (Guttmacher).
En Colombia, por ejemplo, se estima que el 50% de los embarazos no son planificados, y una mujer es abusada sexualmente cada 30 minutos (Women’s Link Worldwide).
En el Caribe, “en promedio, el 56% de las niñas y el 79% de los niños tuvieron relaciones sexuales antes de los 14 años”. La tasa de fertilidad en adolescentes es un 33% más alta que el promedio global. (Programa Conjunto de las Naciones Unidas sobre el VIH / SIDA, ONUSIDA). [2014] The Gap Report. Ginebra: ONUSIDA).
En Brasil, “la proporción de partos entre 2000 y 2012 fue constante, con un promedio de 82 partos diarios de niñas menores de 15 años. Con un 38% en la región noreste y un 18% en el norte. Varios estudios relacionan los embarazos en edades tempranas con condiciones de pobreza, menor educación, menor tiempo en la escuela y menor acceso a servicios de salud (Ministerio de Salud de Brasil, 2014).
Más de un cuarto (27%) de todas las muertes maternas en El Salvador fueron de adolescentes (
American University Washington College of Law Academy on Human Rights and Humanitarian Law (2014). La situación de los derechos humanos de las niñas y adolescentes en Latinoamérica y el Caribe. Panamá: UNICEF)
“El lugar más peligroso para las niñas en Latinoamérica y el Caribe es su propia casa”. (American University Washington College of Law Academy on Human Rights and Humanitarian Law (2014). La situación de los derechos humanos de las niñas y adolescentes en Latinoamérica y el Caribe. Panamá: UNICEF).
Cerca de dos de cada tres mujeres asesinadas en Centroamérica murió por cuenta de su género.
(American University Washington College of Law Academy on Human Rights and Humanitarian Law (2014). La situación de los derechos humanos de las niñas y adolescentes en Latinoamérica y el Caribe. Panamá: UNICEF).
En Latinoamérica y el Caribe, la violencia contra las mujeres por parte de sus compañeros íntimos va del 23% en el sur de la región hasta casi el 41% en los Andes, en comparación con el promedio global de 26.4% (Organización Mundial de la Salud, Prevalencia y efectos sobre la salud de la violencia de pareja y la violencia sexual, 2013).
En un estudio llevado a cabo en 12 países de Latinoamérica y el Caribe, “la mayoría de las encuestas encontró que entre un cuarto y la mitad de las mujeres entrevistadas reportaron haber experimentado alguna vez violencia sexual por parte de su pareja”. (Organización Panamericana de la Salud / Centro para el Control y la Prevención de Enfermedades, Violencia contra las mujeres en Latinoamérica y el Caribe, 2013).
En Honduras, una mujer es asesinada cada 16 horas (Centro de Derechos de Mujeres).
Vea el listado de otras notas de prensa sobre el tema del Virus del Zika.